Esta es una decisión de enorme magnitud, que trae gran alegría a millones de familias, homosexuales y heterosexuales, en todo el país.

Entonces, hoy, mientras celebramos lo que es un fallo histórico, volvamos a dedicarnos a garantizar que todos nosotros, todos los estadounidenses, sin importar quiénes sean o dónde vivan, tengan las mismas oportunidades y la misma libertad para vivir en igualdad de condiciones y de manera segura. . Nos debemos esa promesa constitucional no solo unos a otros, sino también a las generaciones futuras.

 

 

Con este fallo, cualquiera que sea LGBT ahora sabe que mañana, o algún día, dentro de unos años, ellos también pueden casarse con la persona que más aman en el mundo. Y las familias que crían hijos ahora son igualmente dignas de casarse con todo el respeto, la responsabilidad y el apoyo que brinda el matrimonio.

Mary Bonauto talks to Press outside the Supreme Court

Este fallo nos anima a todos, a toda nuestra nación, a defender el principio de que no toleramos leyes que discriminen a las personas por ser quienes son. Las promesas constitucionales de libertad, igualdad y justicia para todos dieron hoy un paso de gigante.

Aún así, como nos recuerdan tragedia tras tragedia, y en este momento, miles de buenas personas se unen para llorar en Charleston, las personas aún son objeto de discriminación e incluso de violencia indescriptible debido a quienes son.

Entonces, hoy, mientras celebramos lo que es un fallo histórico, volvamos a dedicarnos a garantizar que todos nosotros, todos los estadounidenses, sin importar quiénes sean o dónde vivan, tengan las mismas oportunidades y la misma libertad para vivir en igualdad de condiciones y de manera segura. . Nos debemos esa promesa constitucional no solo unos a otros, sino también a las generaciones futuras.